FLORES DE PLATA
Flores de plata
se deshojan febriles
de las paredes desconchadas del
pasado.
El sentimiento se hace hojarasca,
cae caduco
como una hélice sencilla,
hasta la sombra sorda de los rincones.
Una guadaña contempla abrasiva
la retina cascada del olvido,
la nube rosada se disipa en el horizonte
escampado,
pétalos de plata se pudren
en los contenedores de la muerte.
EXPIRA EL PLAZO
Expira el plazo y algo mas.
Una turba de baños amargos,
un centenar de carcaj roídos,
chorros de rabia,
cómo largos manguerazos de caña y vino
y un puñado de labios marchitos,
y una
sombra que mengua con los días.
Mi dolor es espeso como la madrugada,
un montón de jirones pisoteados sobre el asfalto.
Sobre el asfalto,
un ave dolorida,
sobre el asfalto,
con las plumas carbonizadas y el pico rabioso.
Un cuerpo exiguo que yace gris,
como ese ave
pernoctan mis delirios
como ese ave.
Devaneos de un loco abandonado.
ARAÑA
Como una araña
en mi red de relaciones sociales,
globalización burocrática.
Como un arácnido peludo y negro, de ideas provincianas,
convencionalismo en estéreo.
Como un polípedo de los rincones,
sentina enhebrada,
fumando estoy,
de puro tedio.
Así,
así merman los días sin fuerzas,
espíritu quedo.
Y desearía bogar en las aguas del deseo
pero ando tardo y desaliñado.
Sobre las madejas de un insecto cojonudo
pego mi culo,
asido como un cobarde,
dónde es difícil tanto caer como crecer.
NI MIERDA EN LAS TRIPAS
No tengo canto
ni espina ni campo yermo
ni lindas rosas ni metralla en el pantalón
no tengo
ni miembros ni jardines ni azogue
ni trenes de pájaros ni plazas con cadalso
ni sangre ni bilis ni mierda en las tripas
ni palabras de vómito ni fines obsoletos
ni agrietadas carreteras ni fiesta en los ojos
ni pupilas candentes
ni alma ni hueso ni vientre ni esencia,
tan solo poso fotografiado en ondas de aire y sueño
a pie de la alambrada.
CONTRAPUNTO
Inaccesible pétalo,
qué resiste en la caja falaz de mi estómago,
sombrío y aterciopelado
en la oscuridad fundida de jugos gástricos,
veo tu vida posar
en la fosa de vertidos.
Allí
donde el engaño vacila entre sombras y escombros
allí
no debo de estar yo
contrapunto.
NO SE PUEDE ESCUPIR EN LOS VERSOS DEL POETA
No se puede escupir en los versos del poeta!.
He tocado fondo.
De nuevo.
Te digo,
no se puede escupir en los versos del poeta!,
porque
se convierte en áspid que lanza dagas
de ígneo filo arrogante si ha sido agraviado,
porque
se siente puro como la tristeza,
de modo
que se enjuga el llanto y
corre la sangre.
CRUJE
El brillo de mis envejecidos ojos
carraspea
en el horizonte de
hogueriza,
aun arrugo mi rostro sobre la fosa del estío,
aun pernocto caído de moral
en el monte del engaño.
Brisas escarpadas y lenguas escabrosas.
Cruje cruje
bajo las rocas de mi cráneo,
el Fuego Gris circuncidado.
EL GRITO
Sobre corrientes flemáticas,
devaneos viscerales,
meandros irisados
toda una
LL u
v i
A
abrasadora de clavos
en la umbría tarde de la estepa ciudadana,
como a un Cristo
traicionado.
oh traicionado.
NEUMÁTICO ATROZ
Te encuentro en la mañana
pero ya eres noche, ocaso y letanía.
Muero a medio bocado,
incrustado en los arrecifes del delirio
acurrucado en el orificio de los siglos
arrojado como un viejo polizón,
arrojado a un puñado de mandíbulas,
herido como un ave bajo el derrape
del neumático atroz.
El dolor me absorbe el espíritu en desagües discontinuos,
se hacen agujeros en la ubicuidad, supura el ácido
de sus estómagos vanos,
mi amor se pudre como la fruta olvidada
en el bodegón del embuste,
y
cae
el muslo dislocado en un escuálido racimo.
SOLO
Escupido por los siglos de los siglos.
El viento azota el sol de la mañana,
las hojas plateadas como ebrias empedernidas
se agitan basculantes entre el verdor de la maraña.
Soy como una acacia en otoño
clavado en las telúrica orografía que amamanta sus raíces,
erecto en la soledad espinosa de la brisa,
con la cabeza llena de ramificaciones tensas
y hojas amarillentas.
Voy solo como ese negro escarabajo que cruza,
en estos mismos momentos,
sobre mis zapatos negros,
solo
por los sumideros de la madrugada.
SONRIÓ UNA LÁGRIMA
Sonrió una lágrima,
lánguida
y estrecha
como la senda
que me separó
de su rostro caído
en el espacio y la distancia.
Sonrió una lágrima,
desenmascarada
por el reflejo de la una en la otra.
Y la de tiempo que respiré su imagen
como tubo de escape en mi iris,
y la de espacio que consumió
en mis pulmones su voz estridente.
Y la de tiempo
ahogando mi pecho
en frenazos esquizoides
que me dejaron atrás
para siempre, perdiéndome.
Y ya nunca más te alcancé
a ti
a la que nunca, nunca
conoceré.
6 ó 7 DE AGOSTO DE 1998
Un 6 ó 7 de agosto de 1998.
Escupiste en mis versos
hondo,
muy hondo,
sobre el rojo protón rojo de mi sangre
me escupiste muy dentro
niña frívola y vana.
El mal sueño se ha acabado.
TUMBA SELLADA ERES
Llegué a desearte pero ya ni te requiero
llegué a odiarte pero ya ni te empuño
tan solo eres espuma entre mis dedos
eres verso destrozado
tumba sellada eres.
CAPULLO ENCABRONADO
Quita tu coño pastoso de la boca
de mi fluido recuerdo.
Paseo por los parques periféricos
de la gran ciudad y observo
a las parejas que se abrazan
en cálidos cosquilleos vidriosos,
las luciérnagas revolotean por su dual contorno encendido.
Bien eso está bien.
Sobre un beso salta un fresón abierto en dos
y sus manos de nata montada embadurnan
sus curvas y fisuras turgentes que saltan
sobre mis ojos perdidos en Calipso.
Las parejas se abrazan hoy,
como ayer,
pero me siento como un grafiti
en el vagón del olvido de la vía 98.
Hoy marcho con los brazos cruzados,
de bruces sobre mi pecho.
Capullo encabronado.
NÓDULO DAÑADO
En un rincón de podredumbre
pasan los días con las piernas encogidas,
dónde escapa una luz pobre
de mi corazón deshilachado.
La cabeza ahorcada en la tristeza,
umbría sentina que palpita jirones
de desconsuelo.
Caigo al terreno de juego
con un dolor profundo,
es el alma que se contrae en un solo
nódulo dañado.
Todo se retrae hacia el origen,
el dolor es frío,
requiero un esfuerzo más para romper
el cántaro del sufrimiento eterno. Se abre
un pasillo y el hogar se dobla
en un pañuelo metido en un puño
lanzado como saeta al
espacio, joder!.
UN TIPO SOMBRÍO
Soy un tipo sombrío
de txupa oscura,
capa de sombra
careta de antifaz y máscara,
tras un sombrero negro de ala ancha
en carne cuarteada.
Bajo mi barba
umbríos hoyuelos nocturnos, que abren
estanques profundos
en mis ojos de niebla,
y de mi petaca destilan versos de agudas espinas,
clavadas en la lóbrega diana del tiempo.
MIS LABIOS SE ABREN EN PINZAS DE CÓLERA
Mis labios se abren en pinzas de cólera,
se ralla el asco sobre mis pómulos.
En los posos del universo chapoteo pompas negras,
farolas vespertinas,
lance de serpentinas plateadas.
En el asco de los días
aún queda un trazo de albura,
en las lágrimas,
ventanales de opio ebria penumbra,
y el sueño cojonudo de ondinas de parque.
Como un poeta maldito mis versos se derrumban
ante una realidad de medianía programada.
Ensarto ases de fantasía en la solapa circunspecta, y
que os jodan
que os jodan
que os jodan en vuestra nube pro
de brillantina cincelada.
RECORRIDO POR LA ANGUSTIA
La angustia es un ángel mustia
negra furtiva y zigzagueante,
una yedra viuda que se adhiere
a las espaldas del espanto.
Como una turba de aire medroso
reptando por la sordidez
de la penumbra de clavos en la raja del dolor.
Todo desangelado.
Como una nevera de imágenes.
Mandíbulas vacías de cráneo
ladran silencios en ondas
discordantes sobre las sienes del vientre
y la glándula pineal de los ventrículos,
sin un final…………
DESPLOMO
Me pudro en versos disonantes
y en pedaladas de aire,
soy el precipicio de lo que fui
en el resbalón de la muerte.
Caigo en la penumbra como gotera de desván,
Como rimas de un poema sombrío,
caigo irremisiblemente,
irresistiblemente,
en veleidades dignas de una pluma,
en desplome fatuo y contundente,
qué alguien me salve!
qué alguien me salve!
Los edificios se desploman!
la sangre se desploma !
la vida se desploma !
la chaqueta se desploma,
yo también me desplomo.
Pero toda caída tiene como fin el inicio.
QUÉ MÁS SE PUEDE ESPERAR DE TODO?
Me retuerzo en un pañuelo sobre la noche satinada,
me encojo triste
en la blanca soledad, en la nívea
dentadura de la muerte dentífrica
que me acuna sobre
el velo del
alba.
Qué mas da lo que diga,
qué mas da lo que haga.
La sombra despliega en vuelo
de ala oscura un sombrero de escaleras.
Errando, errando,
como una criatura suburbana,
entre la turba inhóspita de garras de carencias.
Errando, errando, como un lúser soñador,
en las esquinas, en las crujías,
en los angostos pasillos,
en los antros y en sus retretes.
Qué más se puede esperar de todo?.
EN UN FLIS
En un instante,
en una punta,
me huye la vida.
En una honda
calada,
en un ende
de un haz,
me huye la vida.
En el brillo
de la retina,
en la hoguera
concisa
de la vena,
me huye la vida.
En el filo
de una uña,
en el soslayo
de una mueca,
me huye la vida.
En los diminutos
surcos de una yema,
en el corazón
de una partícula,
me huye la vida.
Y no creáis,
la persigo tenaz como un vehemente de sueños
desnudos en un puño.
ME CONSUME
La vida me consume como a un canuto
paso mi humareda de días en anémicas caladas,
me consumo como yerba seca
muero en las cosas mas vanas
y
renazco!,
ahorcado en el tronco mas
bajo.
Aletea el hastío como un ave malherida
como un panfleto quemado,
ardo en un ramillete de circunstancias.
RENACIDO
Con un adiós entre los brazos y un puñado de polvo
sobre los hombros, la mañana cae espesa en la fatiga.
Cae espesa sobre la mañana.
El alma se tiñe de tristeza y el pecho se hunde entre los almohadones,
se agrieta mi tez blanca entre la blanca
lucidez del día.
Muero, con un adiós entre los brazos
y renazco!
tras el umbral de mil puertas.
La noche yace devastada a orillas del crepúsculo.
Mi cuerpo se derrite en pespuntes de tristeza
y cruza el parabrisas de la nostalgia donde se balancea el poeta.
Nada es como imagina nuestro temor,
todo fluye en un destino sabio.
Se abre una brecha y un eco rotundo exhorta un adiós,
es acaso esa la voz de mi vientre mas allá de mi vientre?.
En el mar maldito hinco mis dientes de rabia
y camino esperanzado por la tierra azul de la azul braganza.
Bogan mis alas por el cielo nuevo, andan patosas mis
entrañas una hoja de afeitar roza la pupila angustiada.
La sonrisa posa su canto viejo en mi labio
negro.
Como un acordeón me estiro y menguo,
así crezco desde el ocaso, inicio de la primavera,
el rencor está en ruinas, la tristeza ondea izados pendones,
la tarde es frígida,
se retuerce la amargura como una espiral añeja,
muere el pasado en los colmillos del presente,
se pudre mi antiguo esqueleto en el humus florido,
por qué no levantarme?.
oh renacido!!.
BRONKOS ALARIDOS
Más que nunca me duele todo,
la facción última de mi cara sórdida,
la textura dura del cabello,
la charca en mis labios,
seca.
Y un sinfín de mierda que se acumula, porqué,
dónde estoy?,
perdido en la humildad y en la confusión del humo.
Fallezco en broncos alaridos
,qué jodan a todo!
creando, creando
creyendo.
EL LIBRO ABIERTO DE PIERNAS
El libro abierto de piernas
sobre la cómoda,
un cigarrillo deslizando sobre la barba atmosférica
su candor cansado,
un té,
al mas puro estilo del Rif,
la tristeza cruzada de brazos
y una sonrisa feliz, como amarga.
si,
feliz como amarga...circunscribiendo
un ataúd de recuerdos
sobre la tierra de mis labios, tras
la pala de mi lengua.
Y el telón vespertino, como siempre insinuando
jardines y estrofas,
y el reggae de Bob lamiendo de húmedo
mis ojos y que más....?,
poco
eso es
poco y ya.
La tarde busca el crepúsculo,
desolado
en calvas esperanzas, y un sorbo de té más.
RELOJ
Tropiezo con las cosas.
Ellas me empujan para sacarme
de mis casillas,
las manijas del reloj son pinzas metálicas
que te extraen la vida una a una
como quien te saca las muelas.
La extirpa hasta el chasquido final.
Pero decidí columpiarme en las putas manecillas,
negras
como guadañas,
en un vaivén frenético a ver
si hacía palanca.
LA CASCADA DEL UNIVERSO
La cosa espectral
me roza el hombro hueco con manos
de aire.
En un lento atardecer atmosférico,
vidrioso casi putativo,
como un perro viejo,
la sangre huele a agria cerveza,
Y quién soy?,
No sé,
o acaso soy ese puto ebrio que surfea sobre
la cascada del universo?
EL VENTILADOR
El ventilador jadea,
broncas bocanadas de azufre.
La habitación suena como la tarde,
áspera y tensa.
Raciones de finas corazonadas,
por un puñado de yerba!
todo es un descontrol
todo es un descontrol
todo es un ralladisiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimo descontrol
trol
trol.
NADA QUE CONTAR
Al amanecer
párpados en la noche
caen como luciérnaga apagadas
en la sombra del ronquido feroz,
títeres que salen de sus oficinas a captar clientes
y maniquíes que se compran y venden.
Y la mar lejos del olfato
y los días chicles gastados
en el paladar hambriento y taciturno.
Salta a veces la garganta sobre el escenario
y suenan las trompetas y luego
la flecha del ratón toca la x, una pantalla estética
separa el cuerpo del ritmo.
Por fin unos versos verdaderos,
escapo un rato por la atmósfera ligera
y vuelvo
sobre el frio asfalto para cenar
y tomarme la pastilla.
PESPUNTES
Una ráfaga de pespuntes
suturan mi boca.
Grita mi nuez
hacia dentro en todo punto
vital autosuccionado
por el sumidero abismal.
Como jamila olivarera
se derrama pútrida
por el ente personal
perfilando la silueta de un cadáver.
Luego vendrá la brigada especial
y dirán
que fue un suicidio,
pero fueron Ellos
quién lo hicieron,
qué lo sepáis!
ES CUESTIÓN DE TIEMPO
En décimas de segundo meo un susurro
musito un canto
y me anego en llanto.
Es cuestión de tiempo.
Es cuestión de tiempo.
El cielo se abrirá con el corazón
añil
y la voz de Ella .
PREPUCIO
La luna sobresale del horizonte
como un prepucio sonrojado....
me la imagino tan triste...
en arpa vibrante.
ESTOY TAN FELIZ
Estoy tan feliz,
estoy tan feliz,
estoy tan feliz
de nada
de mierda
de nada de hechos de mesas de letras inscritas en muertas
horas
de pared rallada
cochambre de pestañas
y feliz de instante.
Ni eso.
REIVINDICO EL SOÑAR
Reivindico el soñar
orgiástica Majestad!
El estigma de Caín
yace inscrito en mi frente
como un volcán de labios
eléctricos.
Reivindico el soñar.
Oh!, reivindico al soñar.